Otra camiseta en la trayectoria de Sebastián Espigares, que
surgió de Huracán, pasó por Ferro y Pinocho y ahora es flamante refuerzo de
Nueva Estrella.
-Me sedujo la idea porque conozco a Mauro (Antico), lo tuve
como compañero, sé lo que busca, me contó el proyecto, los dirigentes son gente
seria y la idea de todos es estar en el lote de equipos que van a pelear arriba.
-¿Y Pinocho?
-Fue una experiencia muy positiva, formar parte del mejor
equipo de la historia para mí fue un orgullo, es un gran equipo, estoy muy
agradecido a todos, primero a los jugadores que me abrieron las puertas, me brindaron
su amistad, al cuerpo técnico, a los kinesiólogos, a los dirigentes.
-¿De qué te diste cuenta estando en ese equipo?
-Uno se da cuenta de por qué logra lo que logra año a año.
Tener la posibilidad de salir campeón, de ganar la copa, fue algo muy lindo y
voy a estar siempre agradecido a Pinocho.
-¿Por qué no seguís?
-Porque es muy lejos, se me complicaba mucho ir todos los días
a entrenar, tenía más de una hora de viaje y la verdad que en esta etapa,
prioricé cuestiones laborales y personales.
-Y Ferro, ¿por qué no volviste ahí?
-Fue una decisión muy complicada, lo hablé con mis amigos,
con ex compañeros, y con chicos que están en el club, me costó mucho tomar esta
decisión pero bueno, lo que tenía que decir se lo dije a Diego Meirama y espero
que me haya entendido. Es una persona que apreció mucho y se lo comuniqué
primero a él.
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