"ES UN SUEÑO HECHO REALIDAD"

En la antesala de la final de la Copa Argentina, recibimos de parte de La Ñata, este texto con pedido de publicación.  Foto: agradecimiento Olé.

Esta noche, a las 21, se jugará el primer partido de la final de la Copa Argentina 2017, donde Villa La Ñata buscará consagrarse por primera vez buscando la revancha ante River, equipo que lo eliminó el año pasado. La cita de hoy es el Polideportivo Roberto Pando, de San Lorenzo de Almagro, en Boedo (José Mármol 1715). El segundo partido será el miércoles próximo, en Ferro. Ambos encuentros serán televisados en vivo por TNT.

El futsal es uno de los deportes de mayor desarrollo en los últimos años en la Argentina. El momento cumbre fue el año pasado, cuando la Selección nacional, dirigida por Diego Giustozzi, ganó por primera vez el Mundial de la especialidad, en Colombia. Ese hito marcó la explosión definitiva de la disciplina, provocando una verdadera revolución a nivel local, con estadios repletos en cada jornada y ahora con la novedad de que los partidos del torneo organizado por AFA son televisados en vivo por una señal de cable.

Villa La Ñata, del potrero a la gloria

Villa Ñata Sporting Club nació como otros tantos clubes, desde un potrero, en un barrio, donde se juntaban chicos a jugar que desafiaban a otros barrios. La historia empezó a cambiar cuando Daniel Scioli fue a vivir a Villa La Ñata en el año 2007 y conoció a esos pibes que corrían detrás de una pelota. 

A partir de allí, como siempre hizo en cada barrio donde pasó parte de su vida, Scioli asumió un compromiso con la promoción del deporte, teniendo muy en cuenta sus orígenes en el club Villa Crespo, donde su padre fue presidente de la institución, y lo que generó en el Abasto, con el Abasto Boxing Club, la inclusión de decenas de pibes y la historia ya conocida del campeón mundial que surgió de allí, Víctor ^Tyson” Ramírez.

Un día, no tan lejano en el tiempo, Scioli invitó a Diego Maradona a jugar uno de los tantos picados que se hacían los sábados y domingos en La Ñata. Allí, el “Diez” contó su historia, la de un pibe surgido de una barriada humilde como Villa Fiorito; lo mismo ocurrió luego con Carlos Tévez, el Kun Agüero y otros tantos que fueron grandes motivadores para los chicos.

Cada vez se fueron acercando más pibes a jugar y a ver, y Scioli con un grupo de amigos decidieron darle forma al club. En octubre de 2012 fundaron Villa La Ñata Sporting Club. A partir de allí comenzó la participación en FUTSAL AFA, para ello se fueron formando las divisiones inferiores. El primer año en esa competencia, el club dio el gran salto de ascender a Primera.

Con el paso de los años el club se fue consolidando, se incorporó la escuelita con más de 100 chicos y la inclusión de futsal femenino.

La irrupción de La Ñata en el círculo privilegiado motivó a que los principales clubes de futsal comenzaran a tentar –y llevarse en algunos casos- a destacados jugadores formados en la entidad de Benavidez. Con la llegada este año de Coco Mareco y su cuerpo técnico hubo un plus en el rendimiento deportivo.
Los técnicos de inferiores son los propios jugadores de la primera y el capitán en primera es el mismo desde el primer partido que se jugó en el viejo potrero, Edu Maldonado.  
Han pasado pocos años desde la fundación de Villa La Ñata Sporting Club y si bien el club ha ido cosechando logros y alegrías, el presente lo encuentra en un momento cumbre: luego de eliminar a Kimberley (último doble campeón) y a Boca, está disputando nada menos que con River la final de la Copa Argentina 2017, que puede clasificarlo para jugar la Copa Libertadores. Es un sueño hecho realidad.