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Hasta hace un par de meses, poca gente sabía quién era Daniel Fina. Como DT de tercera, cuarta y quinta de 17 de Agosto, hacía su trabajo en silencio. De pronto, la renuncia de Guillermo Freire en primera divisón,. lo catapultó al plantel superior, aunque, por ahora, en forma interina. Luego del receso, sus primeros resultados fueron asombrosos: en la fecha del reinicio, le quitó Agosto le quitó el invicto a Pinocho. Dos días después, le empató a Boca. Y para coronar un fin de semana inolvidable, al día siguiente, se consagró campeón con la cuarta división.
Todos estos logros, ameritaban una nota con Fina, el hombre al que hasta hoy pocos conocían, pero que sin dudas, tiene valederas razones para salir del anonimato.
«Cuando el Bicho Freire dio un paso al costado, el club me pidió que me hiciera cargo de la primera hasta fin de año. Debuté con Racing, antes del receso. No tuvimos tiempo de trabajar con respecto al equipo, pero en lo anímico salimos a hacerles un gran partido, y ellos nos ganaron inmerecidamente. Después, en le receso, fuimos trabajando, planificando... Usamos todo ese tiempo para pensar: a Pinocho le juganos así, a Boca así, a River así... Ahora están todas las cartas echadas, porque al haber fecha cada tres días, ya es como que directamente vamos a cada partido sin tiempo de entrenar».
«Lo primero que se me pasó por la cabeza cuando le ganamos a Pinocho, fue una sensación muy linda. Yo sabía que se daría un partido así, tan cerrado. En la semana habíamos planificado todo. Se entrenó muy bien en defensa. Sabíamos como marcar a Elías si salía con el pie. O como tapar a Riente para que no remate. Y se nos dio. Pero nada es casual ni se hace de hoy a mañana»..
«Hay un plantel importantísimo en 17 de Agosto. Son cracks, jugadores de nivel mundial. Lo primero que yo les dije es que con ese nivel, ellos no podían esar en ese lugar en la tabla. Que yo iba a poner de lo mío, pero que ellos solos tendrían que salir de ahí, porque son futbolistas de enorme calidad. Y bueno, lo entendieron. Juntos, le fuimos dando forma. Tuvimos la suerte de encontrar muy rápido el equipo. Eso nos benefició».
«Yo tengo las cosas claras. A mí me dijeron que esto sería un interinato hasta fin de año, mientras tanto la dirigencia buscaría un técnico con tranquilidad. Yo acepté estas condiciones. Nadie me dijo que si tenía buenos resultados me quedaría. Mi objetivo, por lo tanto, es el de trabajar con la esperanza de que los chicos levante. La verdad que me daba lástima que un plantel de esa categoría, estuviera pasando por aquella situación».
«Yo me dedico a trabajar y si después las cosas vienen, mejor. Si el club considera que me quede, me quedaré, y si consideran que debe venir Carlos Bianchi, vendrá Bianchi. Yo estoy para poner el hombro. Nada más».
« Fui jugador de cancha de once, pero las circunstancias de la vida me llevaron a ser papá a los 17 años y tuve que dejar para salir a laburar. Eramos una familia pobre. Un poco más adelante, empecé a volver. Me interesó la dirección técnica y a los 20, ya dirigía baby. En futsal arranqué de la mano de Chupete Carfagna, colaborando con él en El Talar. El me comentó que me veía condiciones y me animé. Ahora hace seis o siete años que estoy en esto. Dirigí Estrella de Maldonado también como ayudante de Carfagna-, Lamadrid y 17. Además hice el curso en ATFA y ahí aprendí mucho».
«Con respecto al título en cuarta, estoy muy contento. Fuimos partido tras partido. Empezamos el año complicados, al ser un grupo muy grande. Después algunos chicos fueron dejando y el equipo lo fuimos encontrando. Estaba claro que el Clausura lo pelearíamos. Cuando nos quisimos acordar estábamos ahí, como únicos punteros, después de que River perdiera cinco puntos sobre seis. De mi parte, sólo me resta agradecerle al club por haber confiado en mi proyecto cuando estaba sin trabajo».
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