No es común que suceda algo así en el fútbol. Por ende, tampoco en el futsal. Por eso, lo ocurrido este sábado en el partido de séptima disputado por Atlanta y Juventud, vale la pena ser comentado y destacado. En primer lugar, no está de más agregar que ambos equipos pelean la punta. La visita llegaba a este encuentro como líder con 28 puntos, en tanto los locales, lo seguían con 27, siendo sus únicos escoltas. Era un encuentro muy esperado para los dos, con un Atlanta que aspiraba a ganar para saltar a la punta. No obstante, era su rival el que se estaba imponiendo 3-1 cuando promediaba el ST. Entonces, sobrevendría la jugada más comentada de la tarde...
Los de Villa Crespo atacaban en busca del descuento de manera insistente, incluso, con su arquero Franco Núñez actuando en posiciones ofensivas. En uno de esos avances el arquero penetró en campo rival, pero un mal movimiento hizo que cayera al piso y la pelota quedara en poder de sus adversarios, que libremente marcaron el 4-1.
El golpe sufrido por Núñez fue tan fuerte, que quedó tendido en el suelo y hasta habría estado inconsciente unos instantes. La decisión del técnico rival, Adrián Torricella, dejó boquiabierto entonces hasta a los propios contrincantes: cuando Atlanta sacó del medio, los jugadores de Juventud se abrieron permitiendo que los Bohemios señalaran el gol, en lo que fue el 4-2.
A continuación, se produjo otro descuento y finalmente el empate definitivo: 4-4. Al concluir el cotejo no hubo grandes festejos ni lamentos, pero sí una expresión de profunda gratitud de la gente local hacia los visitantes. Y cuando La Voz del Futsal reunió a los técnicos para la foto, Torricella aclaró: "A mí no me corresponde ningún mérito, los jugadores fueron los que tomaron la iniciativa y se dejaron hacer el gol. Nada más que ellos..."
Por último, para cerrar positivamente la jornada, el golpe sufrido por Franco Núñez no revistió consecuencias graves y el arquero se repuso a los pocos minutos. ¡Enhorabuena!
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