Su campaña comenzó en Primera B, actuando para Morón. En 2012 metió una excelente cantidad de goles (37) y se afianzó como uno de los jugadores más destacados de la divisional. Siguió en el Gallo hasta 2016, donde, con 35 gritos, estuvo muy cerca de aquel récord personal de efectividad. Su juego se trasladó a Newbery, Camioneros y por último, La Catedral. En 2019, en esta entidad logró el ascenso a la C. “Por ahora sigo en La Catedral, si no hay grandes cambios seguiré ahí”, cuenta Cristian Intorre.
¿Qué recordás de tu debut en primera?
Mi debut en primera quedó lejano, por así decirlo, tenía mucha ansiedad. Jugué en reserva en Morón y pude dar el salto a primera. La verdad que fue hermoso.
¿Cuál fue tu mejor momento como jugador?
Quiero creer que fue el año pasado en La Catedral. Siento que gracias a mis compañeros, cuerpo técnico, Diego Citraro (el DT) y la dirigencia, me dieron la confianza para tener un gran año y lograr el ascenso. También el 2016 de Morón, terminando un gran año personal y grupal, les ganamos a equipos que hoy pelean en la máxima categoría del futsal argentino, con el DT Fede Díaz a la cabeza.
¿Tu mejor partido?
No recuerdo mucho, soy de tener buenos partidos cuando la meto jaja… Me acuerdo de uno en Morón, en cancha de Almafuerte en el 2012, donde metí cuatro goles, y con La Catedral el año pasado, contra Monte Viejo, donde también hice cuatro goles. Ambos fueron buenos partidos.
¿Y el peor?
Uno personalmente lo siente cuando perdés y encima te toca tener un mal partido. El año pasado con Estrada, jugando nosotros de local, jugué mal partido. Encima nos ganaron y eso nos complicó la carrera por el ascenso.
¿Te dedicás a algo más aparte del futsal?
Soy empleado administrativo en una empresa. El futsal es mi cable a tierra, se extraña muchísimo.
Con respecto a esta Cuarentena, en lo personal ¿qué es en lo que más te perjudicó?
En muchas cosas, el club había invertido mucho en la actividad y teníamos un cuerpo técnico nuevo, que tienen unas ganas bárbaras de laburar. Se ve todo empañado por esto, sumado a que tuve la desfortuna de perder a mi papa hace 20 días. Todo suma en este parate.
¿Y si tuvieras que encontrarle algo positivo?
Que el grupo se unió muchísimo, aún sin vernos las caras estamos contactados mediante zoom. La verdad que eso hace que todo se haga más llevadero, esperando, si Dios quiere, tener una revancha en el 2021 y que se termine esta pesadilla.