Corría 2008 y Pinocho e Independiente se encontraban en el Cedem de Tres de Febrero. Dos pibes que recién arrancaban en la disciplina, aceptaban fotografiarse juntos para La Voz del Futsal. Maxi Rescia y Cristian Borruto eran dos baluartes de una nueva camada en sus respectivos equipos. Pese a su juventud, estaban afianzados en el plantel superior y el paso al fútsal europeo comenzaba a vislumbrarse para ambos. Claro, seguramente ni por asomo imaginaban la trayectoria que les esperaba, pues no sólo triunfarían en tierras europeas sino que además, se convertirían en piezas claves a nivel internacional.
La Selección contó con ellos, aproximadamente desde aquellos tiempos, hasta la actualidad. Pasaron los años, los torneos, los mundiales… Junto a otro grupo de notables jugadores, se hicieron fuertes a la hora de defender la casaca celeste y blanca, se cargaron de éxito a nivel clubes y con el escudo de AFA. No regresaron más para actuar oficialmente en la Argentina en el campeonato local, pero se prodigaron generosamente cuando les tocó representar al país. Este 29 de septiembre, el equipo en general y ellos en particular, dieron una nueva muestra de jerarquía, merced al pasaporte a la final del Mundial que sacaron tras eliminar a Brasil.
Muchas cosas sucedieron desde aquella tarde de 2008. Cuando la
cámara hizo clic y disparó la imagen, qué difícil era saber para el fotógrafo,
que en una jornada primaveral en la Argentina, unos 13 años después, esta foto
volvería a utilizarse bajo circunstancias totalmente diferentes. En el otoño de
Lituania, Rescia y Borruto, ¿la recordarán?
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