abril 27, 2014

HURLINGHAM GANÓ UN PARTIDO INCREÍBLE

Ganaba 3 a 1, pasó a perderlo 4-3, lo empató a los 18' del ST y terminó ganando con un quinto gol que llegó cuando el cronómetro se ponía en cero. De esta manera puede resumirse el emocionante triunfo de Hurlingham, que así consiguió su primer éxito en la Zona C de Segunda, mientras su oponente quedó con tres puntos y acumuló su tercer traspié al hilo. 
La visita lució mucho mejor en el PT. A los 5' Emanuel Martínez puso el 1-0, aumentando Romero a los 9'. A los 12' descontó Aciar pero un minuto más tarde, Gabriel Schack marcó el 3-1. A Ferro, nada le salió bien en aquella etapa inicial. En contraposición, Hurlingham exhibió una alta eficiencia, sobre todo de cara al arco adversario.  
En el complemento el trámite cambió. Ferro se sacudió la modorra y reaccionó como nunca antes lo había hecho. En consecuencia, encerró a su rival en torno a Giani y comenzó a revertir la historia. A los 3' Cáceres descontó; a los 6' el mismo jugador señaló el empate y a los 11' Aciar puso al local arriba, ante el delirio de su gente.  
Sin embargo, el equipo de Landriel no estaba muerto. Los dirigidos por Barbona parecían tenerlo controlado, aún a pesar de estar con cinco faltas cuando restaban 4 minutos. Pero pronto se le vendría la noche. A los 17', Schack quedó de arquero-jugador. A los 18', el recurso surtió el efecto deseado y Martínez señaló el 4-4 tras gran jugada de Pinto. 

Y los 40 segundos finales fueron para el infarto. A falta de 37, Lombardi se perdió el quinto sólo debajo del arco; cuando eran 25 los segundos restantes, el que tuvo una situación similar fue Hurlingham. Por último, sólo quedaban 8 segundos y Cáceres, también solo, desperdició la gran oportunidad. 

Daba la sensación de que ya estaba todo dicho. Pero este increíble partido tendría preparada una sorpresa más. Faltando 1 segundo, Schack -que había vuelto a su posición original- recibió un balón al borde del área. Sin marca, enfrentó a Gravina y ante el achique del arquero se la tocó a su palo izquierdo milésimas de segundo antes de que sonara la chicharra. En Hurlingham nadie podía creerlo. En Ferro, que ni siquiera tuvo fuerzas para protestar, tampoco...

SALDOS Y RETAZOS 
Jorge Zemba, integrante del cuerpo técnico de All Boys, se dio una vuelta por Estrella de Boedo con su cámara filmadora. ¿LA explicación? Los de Floresta comparten zona con Hurlingham y Ferro y enfrentarán al elenco del Oeste la fecha que viene. 
Gustavo Barbona junto a su pequeña hija, previamente al comienzo del match. Más allá del resultado, el Tavo está viviendo un momento feliz al poder dirigir al club del cual es hincha. Y toda su familia, también parece vivirlo de la misma manera.  

Matías Torres regresó al futsal luego de... ¡diez años! Efectivamente, el jugador que en 2014 cumplirá 33, había colgado los botines por razones personales hace una década, cuando era uno de los mejores valores de los Verdolagas. En su regreso, todavía se lo notó falto de ritmo y estado físico. Por eso actuó poco tiempo, aunque mediante algunos destellos, dejó en claro que su calidad está intacta.

En Hurlingham hay cuatro futbolistas que jugaron en Deportivo Morón hasta el año pasado: Soto, Martínez, Mansilla y Tavaré. El "chaque" Martínez, autor de dos goles, fue el que más se lució. Tavaré, en su puesto de defensor, también tuvo muchos minutos en cancha.

Leo Cáceres es atendido por el médico luego de haber recibido un fuerte golpe en la espalda. El ex Boca tuvo un gran comienzo de ST, haciendo el segundo y el tercer gol de Ferro. Luego debió salir afectado por dolor, aunque en los minutos finales reingresó y redondeó una más que aceptable labor personal.

La tensión se apodera de los minutos finales. Hasta allí la visita perdía 4 a 3 y su técnico Oscar Landriel era expulsado por protestar. "Después de que ellos entraron en quinta falta no nos cobraste ni una", le reclamó airadamente al árbitro Ibáñez.  El tucumano, le señaló inmediatamente el camino hacia la tribuna.
Más nervios. Esta vez, cuando la chicharra ya había decretado el final del encuentro. Algunos hinchas de Ferro ingresaron a la cancha, disconformes porque según ellos, los jugadores visitantes se habían sobrepasado en el festejo frente al sector local. Tras algunos instantes, renació la calma. 

Gabriel Schack, el héroe de Hurlingham en la noche de Boedo. Al margen de haber jugado un partidazo (un fenómeno con la pelota bajo la suela), definió con absoluta frialdad en el momento más álgido del cotejo, conquistando el 5-4 con un preciso toque ante el achique de Gravina. Enseguida, fue sepultado en un mar de abrazos.



1 comentario:

Unknown dijo...

VAMOS EL TRIANGULITO!!!