MUCHO MÁS QUE UN PARTIDO DE FUTSAL
Hoy: Atlanta 2-Cervantes 2 (octava)
Para ver y comentar las fotos, click en el siguiente enlace de facebook:
PLANTEL DE CERVANTES: Néstor Padilla, Ezequiel Paniagua, Ezequiel Quiles, Erik Pérez, Jonathan Ledesma y Thiago Colantonio. DT: Juan Manuel López.
PLANTEL DE ATLANTA: mariano Ratto, Nicolás Brunetti, Mauricio Navarro, Javier Mandel, Juan Fronti, Eduardo Legido, Franco Núñez, Thiago Bello Herrero. DT: Matías Maranzano.
Era el partido más atractivo de la fecha en la octava división de Tercera: Cervantes (segundo con 11 puntos), visitaba a Atlanta (tercero con nueve), mientras el puntero, era un Almirante Brown que tenía fecha libre.
La encumbrada posición de los equipos se trasladó al rectángulo, donde se vio un partido muy atractivo: buen trato de pelota, acciones equilibradas y cuantiosas chances de gol en ambos arcos. El encargado de abrir el marcador para el Bohemio fue Ratto, un colorado de buen pie y gran porte físico para su edad. Con ese mentiroso 1-0 (pues la visita hizo méritos como para empatar) terminó el PT.
Pero el 1-1 llegó pronto. Apenas arrancó el ST lo convirtió Paniagua, un excelente jugador (ver Saldos y Retazos) que se cargó el equipo al hombro. Claro que ni bien se produjo el empate, Atlanta se fue con todo arriba y logró conquistar el 2-1, por intermedio de Mandel. Siguió presionando Cervantes en busca de un nuevo empate, el tiempo que también el local se lo perdía de contra. Hasta que otra vez Paniagua batió la resistencia de Franco Núñez y el 2-2 se instaló en forma definitiva. Unos minutos más tarde el silbatazo del juez decretó el cierre del match, aunque por lo que entregaron estos dos equipos, y la forma generosa en que se brindaron por el espectáculo, hubiera sido lindo que siguieran jugando un ratito más.
SALDOS Y RETAZOS
En las inferiores siempre hay algún papá (u otro familiar o amigo) deseoso de inmortalizar a los chicos sacando la tan mentada foto del equipo. En esta ocasión, eso también ocurrió con la octava bohemia.
Una imagen panorámica del estadio de la calle Humboldt, que lució como un verdadero "gigante" considerando el tamaño "mini" de los pibes y, sobre todo (y esto lamentablemente), si lo que se tenía en cuenta, era la escasa cantidad de espectadores, en especial, en el sector destinado a los locales.
¿Lo recuerdan a Brunetti, aquel delegado que por muchos años representó al futsal de Atlanta? Ahora, retirado de la función dirigencial, pasó a ocupar el rol de papá de un jugador bohemio. Se trata de Nicolás, junto a quien muy sonrientemente posó al final del encuentro.
Contrastando con el escaso número de hinchas locales, los visitantes sí acercaron una barrita de padres, que muy juntitos, se ubicaron en una de las tribunas del gimnasio de Villa Crespo.
La figura del partido: Ezequiel Paniagua. Con la 10 en su espalda, se encargó no sólo de meter los goles de Cervantes. Además, jugó e hizo jugar a sus compañeros. Desde la posición de pivot, gambeteó, abasteció, y, aprovechando su robusta contextura, ganó en el cuerpo a cuerpo en forma constante. ¿Unas de sus máximas virtudes? Una fuerte pegada, mediante la cual cada disparo al arco suyo, era medio gol.
1 comentario:
Ezequiel Paniagua
Publicar un comentario