Boca venció a Independiente 6 a 3 y le quitó el invicto al Rojo, que acumulaba puntaje ideal si bien no era líder porque aún tiene un pendiente con Lamadrid. En tanto, el equipo de Meloni logró prolongar su racha triunfal, conservando tres victorias en igual cantidad de presentaciones (también tiene un pendiente, que jugará con Pinocho cuando los de Urquiza retornen de la Copa).El partido tuvo un trámite que favoreció a la visita en su comienzo. Independiente supo sacar provecho de dos distracciones defensivas boquenses y ganaba 2-0 sobre los 13'. No obstante, en el minuto siguiente Boca descontó a través de un penal que D'Otolo le cometió a Santos, y que protestó todo el sector rojo. DEsde nuestra posición dio la impresión de que la falta existió, aunque quienes estaban cerca aseguraron que Ghibaudi se equivocó al señalarla y fueron duros para con la actuación arbitral (Viñas fue el asistente). D'Otolo, protagonista de la polémica acción indicó, muy disgustado tras la finalización del cotejo:
"Estábamos 2-0, tranquilos, y te cobran un penal que no existe. Lo vio sólo él. Es una vergüenza, una vergüenza... ni los de Boca lo pidieron. Penal y sexta falta. Yo no tengo nada contra Ghibaudi, es buen tipo, pero al final siempre nos perjudican a nosotros. Escobar pegó una patada de atrás, el "dos" también... Y ni amarilla, yo la verdad que no entiendo. No digo que actùen de mala fe y que no se puedan equivocar, pero siempre es en contra nuestro. Ya estoy cansado de esto: hay que ganarle a los rivales y a los árbitros".
Luego del descuento de Canessa, Boca se subió al envión y de inmediato llegó al empate por intermedio de Taffarel. Con ese 2-2 terminó el PT y apenas se inició el segundo, Escobar estampó el 3-2. A los 11' NAvarro marcó el cuarto, lo que contribuyó a que el local visualizara el triunfo más cerca que nunca. Sin embargo, Boca dejó crecer a un adversario que parecía muerto físicamente, pero que de la mano del propio D'Otolo -que jugó el tiempo completo- sacó fuerzas que le permitieron emparejar el trámite.
Así, la acumulación de infracciones favoreció esta vez a Independiente (el elenco auriazul también hizo severos cuestionamientos hacia la dupla arbitral), aunque cuando los de Avellaneda tuvieron la posibilidad de convertir mediante sexta falta, desperdiciaron dos chances, ambas en el minuto 13: D'otolo desvió la suya y Gravina le atajó el disparo a Hiza.
Después, casi todo fue de Boca: Santos convirtió el 5-2, Poggio descontó (5-3) y a diez segundos de la chicharra el reaparecido Barbona, con otra sexta falta, marcó el 6-3 definitivo.
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