Como vive nuestro deporte Alejandro Castelao, un protagonista de la vieja guardia.
Veinte años atrás, era un jugador de promisorio futuro. Pronto confirmó lo que prometía y se ganó su lugar en primera, comenzando por Platense y luego en River. All Boys Saavedra y Kimberley también lo tuvieron en sus filas. Tras diez años de carrera se retiró y fue apuntando su objetivo hacia la dirección técnica. Hoy, es el DT de la tercera calamar: “Estamos en dupla con Gustavo Tufano. Antes estaba con Martín Licciardello, pero nos dejó para dedicarse más a la familia. Además colaboro con Carlos Sberna en primera, desde hace tres años”, cuenta Castelao.
-¿Zafan del descenso?
-Tengo confianza en que vamos a zafar. Perdimos muchos partidos ajustadamente. No hablo de merecimiento porque en este deporte, tenés que hacer los goles. Pero este es un juego muy psicológico. Nosotros, nos caíamos rápidamente cuando nos convertían un gol. Pero bueno, hay que levantar cabeza, seguir trabajando y ganar lo que nos falta.
-¿Así que vas a ser técnico?
-Recién arranco con esto. Tengo un largo camino de aprendizaje todavía. Me gustaría hacer cursos. Me hablaron del de ATFA, del de BAFI... Quisiera tener más tiempo en la semana para poder hacerlos.
-¿Llevás la cuenta de cuánto hace que dejaste de jugar?
-Uy, hace como diez años. Lo último fue en Kimberley. El equipo estaba en la B y llegamos con los chicos de All Boys Saavedra. Me llevó Condo (González) pero sólo duré un mes. Yo ya tenía dos nenes chiquitos. No me daban los horarios. Jugué solo un partido, con Racing. Después le agradecí al técnico y me dediqué a la familia.
-¿Cómo ves el futsal de hoy en día?
-Es muy bueno, muy dinámico. Tiene mucho de físico pero también de técnica. Eso es lo que más me gusta. Se presiona más intensamente.
-¿Los de tu camada podrían jugar en este futsal?
-Tendríamos que entrenar mucho más. En mi época no prevalecía lo físico sino lo técnico. Jugaba el que jugaba bien a la pelota. Ahora tenés que correr. Pero sí, supongo que respetando eso, podríamos jugar tranquialmente.
-¿Vos entrenabas?
-En mis primeros tiempos en primera me costaba. Después me di cuenta de que tenía que cambiar. Cuando de Platense pasé a River, en el 2000, me explicaron todo lo que significaba la parte física y me adapté bien.
-¿Ya fumabas?
-Sí... Esa es una cuenta pendiente: dejar el cigarrillo. Me propuse que este año o el que viene, lo voy a hacer. Mientras jugaba no me sentía mal. Yo estaba en actividad en todo momento, ya sea entrenando o jugando, pero seguramente el cigarrillo me afectaba.
-¿Qué te dejó tu paso por River?
-Me llevó Veco (De Luise). Él te enseñaba como jugar al futsal. Te remarcaba eso: pelota al pie, dos toques, movilidad, mirar el arco de enfrente pero con rotación e inteligencia. Con él dejamos de jugar fulbito. Hubiera sido lindo también ser dirigido por Trama, ya que a él le gustaba el buen fútbol y atacar.
-¿Por qué no jugaste en la era Trama?
-Estuve dos años con Veco. Cuando vino Oscar dejé porque había nacido mi primer hijo. Más adelante volví a Platense y luego a All Boys, donde había más flexibilidad de horarios. Era un grupo grande de amigos y anduvimos bien. Nos divertíamos, entonces los resultados llegaban con mayor facilidad.
-¿Estuviste en alguna Selección?
-En un sub 13 con Larrañaga. Recuerdo que entrenamos dos o tres meses y fuimos a jugar un amistoso a Paraguay. Ganamos 3-1. Me llevé varias enseñanzas tácticas de Fernando.
-¿Qué otras diferencias notás con tu época?
-Hoy el jugador está obligado a ser mas profesional para mantener el ritmo del partido. Más allá de tener que trabajar y estar con su familia, si no se cuida y no entrena, se le hará muy difícil. Ese es un cambio grande con respecto al viejo futsal.
-¿Seguiste el Mundial?
-Me vi todos los partidos. Primero por internet y después por la TV Pública. Fue una emoción enorme. Que el deporte que uno hizo de chico llegue a ser campeón del mundo, es una alegría muy grande.
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