octubre 05, 2017

“SENTÍ QUE TENÍA QUE VOLVER A JUGAR”

 Guido Alonso dejó de ser el técnico de Parque y ahora integra el equipo.

Las vueltas de la vida (y del futsal) permiten cosas como ésta: hasta hace poco, Guido Alonso era el DT de Parque y Juan José “Peluca” Moirano, integrante de su plantel. Ahora, es exactamente al revés. Y todo se dio sin ninguna transción de por medio.
Con el histórico jugador de Parque en el rol de entrenador, el Tricolor comenzó una etapa de triunfos y ve con más optimismo el cierre del certamen de Primera B. En cuanto a Alonso, con sólo 26 años, se “retiró” de la dirección técnica para volver a ponerse los cortos y ser una pieza importante del equipo: “Estoy contento por haber vuelto a jugar -afirma Alonso-. Yo me había roto los ligamentos cruzados. Como  me recuperé y estaba fichado, volví. Fui de menor a mayor. Me siento bien pero todavía me falta. Me costó. Fue mucho tiempo sin jugar. Voy de a poco, aportándole lo que puedo al equipo. Habiendo sido entrenador se te transforma el panorama. Es una visión diferente la que tengo”.
-¿Cómo definirias tu carrera como técnico?
-Fueron tres años en los que aprendí muchísimo. Por ahí este año me faltó algo más de personalidad para sacar el equipo adelante. No es el momento para seguir trabajando como DT, pero igual, sé que puedo seguir aprendiendo. Los dos torneos anteriores, en los que casi logramos el ascenso, pienso que estuvieron bien.
-¿De qué modo se determinó el cambio de función?
-Lo hablé con el Negro Jorge, el Leche La Paglia, el Bocha Batista (dirigentes)... Fue de común acuerdo. Ellos, que me conocen de chico, dijeron que la mejor opción era que me pusiera a jugar. Para mí era lo más indicado, también para que los jugadores vieran otra cara en el banco. Incluso ellos me pedían que volviera a jugar.
-¿Tuviste que pensarlo mucho?
-Cuando perdimos contra SECLA sentí que tenía que dar un paso al costado y volver a jugar. Me tomé mi tiempo, pero lo quería hacer. La parte dirigencial me me dio fuerza.
-¿Cómo viste al equipo después de la variante?
-No esperaba que los resultados fueran tan positivos de un día para el otro.  Pero como charlamos entre nosottos, todavía no logramos absolutamente nada, más allá de haber ganado tres partidos consecutivos, cosa que no habíamos hecho en todo el año.
-¿Qué opinión te merece el nuevo DT?
-El Pelu tiene mucha personalidad. Le cambió en gran medida la actitud al equipo y recuperó tres o cuatro jugadores. Eso es bueno. Los resultados ayudaron. Al ganar, el clima es diferente.
-¿Cambió algo tácticamente?
-No...Seguimos jugando igual con un sistema de cuatro y presión alta. Pero la actitud sí es distinta. Es tremendo como cambió. Estamos defendiendo más correctamente. Y atacamos menos, pero mejor.
-¿Cómo es la relación con Moirano?
-Muy buena. Con él ya veníamos hablando del tema. Él sabía que yo tenía que jugar. Pelu siempre tiene gran predisposición para ayudar al club. Es hincha de Parque más que cualquiera. Conmigo no le tocaba jugar tanto, y a pesar de eso, venía, entrenaba y era el primero. Sin que le tocara tener minutos, ayudó muchísimo. Me sorprendieron sus ganas. Él fue importante como para que yo esté jugando otra vez, fue uno de los que me convenció. Lo mío era el fútbol de cancha de once, pero hoy me toca estar de este lado y quiero brindarme  por el club y por el Pelu, que me está dando la confianza.
-¿Zafan del descenso?
-Creo que sí. La venimos remando desde abajo porque hicimos una primera rueda muy mala. Pero estoy convencido de que podemos lograr resultados. Ojalá sigamos de la misma manera.
-¿Tenés esperanzas de volver a cancha de once?
-Yo estuve tres años en San Miguel, con contrato profesional y todo. Además jugué en San Martín de Formosa en el Federal B. Ahora, creo que ya no voy a volver. El fútbol se ensució mucho. Prefiero jugarlo con mis amigos, que así se disfruta más.
-¿Cómo resultó la experiencia en Formosa?
-Fue dura. Hubo 15 días donde la pasé mal, viviendo en una pensión en condiciones muy precarias. Lamentablemente hay mucha pobreza en esa provincia. Aguanté hasta donde pude... Pero siempre suman esas experiencias para aprender más de humildad y entender dónde está parado uno. A veces creemos que toda la gente vive como nosotros vivimos acá. En Formosa comprobé que lo distinto que es.

No hay comentarios: