URUGUAY-BRASIL, LA FINAL DE AMÉRICA

Mañana por la tarde, uruguayos y brasileños serán protagonistas de la final de la Copa América. Ambas selecciones se adjudicaron ese derecho en función de las respectivas victorias ante Paraguay y la Argentina, en las semifinales que se jugaron hoy viernes. En primer turno, Brasil superó a nuestro representativo por 5 a 2, y luego los locales –en el alargue- dieron cuenta de los guaraníes por 3 a 1, tras el empate de 1 a 1 en el tiempo regular.

BRASIL, SIEMPRE BRASIL
La Argentina llegó a este nuevo enfrentamiento con la mejores expectativas. Sin embargo, quedó demostrado una vez más que al equipo verdeamarelho no se le puede dar un milímetro de ventaja. En efecto, el comienzo fue todo de Brasil y en el marcador se reflejó esa superioridad: al minuto de juego, las cosas ya estaban 2-0, por goles de Gabriel y Schumacher. Los dirigidos por Fabián López intentaron recomponerse y a los 3’, Rescia encendió la llama de la esperanza, logrando el descuento. Pero al promediar la etapa tres golpes seguidos recibidos de parte del implacable elenco adversario (Vinicius y Marquinho a los 10’ y Wilde a los 11’) pusieron a la Argentina prácticamente al borde del nocaut.
Con ese 5 a 1 culminó la primera parte. En el complemento, la pelota y las situaciones de gol siguieron siendo de los brasileños, aunque en esta ocasión, la valla de Guisande no pudo ser vulnerada por cierta falta de puntería que el rival padeció a la hora de concretar. Entretanto, los dirigidos por PC comenzaron a cargarse de faltas, algo que marcaría el último tramo del encuentro.
Faltando siete minutos, el DT argentino envió a Santiago Elías a la cancha, consiguiendo así una variante ofensiva de la que anteriormente carecía. Las clásicas penetraciones del arquero de Pinocho en campo adversario equilibraron las acciones en alguna medida, a la vez que Corazza señaló el descuento a través de un disparo de larga distancia, argumento que se había convertido en la mejor vía para inquietar a Franklin. De inmediato, Brasil llegó a la sexta falta, pero Franklin –adelantándose varios metros- le tapó el remate a su ejecutor, Elías. Dos minutos después la Argentina contó con otra chance igual. Wilhelm tomó el lugar de Elías, pero el remate del Alemán salió desviado y enseguida llegó el final.
La derrota y el hecho de haber desperdiciado sobre el final dos claras posibilidades de acortar distancias, dejó una mueca de dolor. No obstante, el hecho de saber que se perdió ante el mejor equipo del mundo y que el objetivo de clasificar para el Mundial está cumplido, es motivo como para afrontar el último partido de la mejor manera y esperar con satisfacción la vuelta a casa.

URUGUAY GRITÓ EN EL SUPLEMENTARIO
Un encuentro repleto de emoción sostuvieron charrúas y guaraníes. Finalmente, la victoria quedó en manos de los locales, que si bien estuvieron en desventaja a la hora de contar las situaciones de gol para uno y para otro, equilibraron el trámite en base a pura garra y corazón, y en el alargue, consiguieron el triunfo gracias al cual el pasaporte a la final dejó de ser un sueño inalcanzable.
René Villalba abrió el marcador para los albirrojos, a los 9’. El veterano Skurko estableció pronto el 1-1, tanteador que ya no se movería hasta el final del tiempo reglamentario. Paraguay procuró adueñarse de la iniciativa, pero comenzó a chocar contra la sólida figura de Roibal, un arquero que fue agigantándose con el correr de los minutos y que –con varias salvadas heroicas- terminó convirtiéndose en la máxima figura de los Celestes.
En el alargue la tensión emocional creció, como así también lo hizo el número de llegadas de Paraguay al arco rival. Pero el que terminó yéndose victorioso al descanso fue Uruguay, pues cuando faltaba un minuto para que se cumplieran los primeros 5’, Moliterno recibió un centro al segundo palo y de cabeza empujó el balón a la red, con toda la defensa paraguaya mal parada. Las lágrimas del experimentado futbolista al ver la pelota adentro, le pusieron una cuota de dramatismo extra al infartante epílogo.
Todavía, quedaba el mini-segundo tiempo, en el que los guaraníes salieron a matar o morir y donde los charrúas defendieron con uñas y dientes, apoyados en la soberbia tarea de un Roibal que salvó al menos cuatro claras situaciones de gol. Y cuando al arquero no pudo, también los palos jugaron a favor de los Celestes.
El árbitro Sergio Ghibaudi –de muy buena actuación- se preparó entonces para pitar el final. Pero todavía hubo tiempo para una emoción más: faltando segundos apenas, Uruguay estuvo a punto de marcar el tercer gol de contragolpe, pero un defensor paraguayo lo impidió cometiendo mano. Expulsión, penal y, ahora sí, gol uruguayo. Más lágrimas, más risas, final... y a esperar a Brasil.

LOS DOS PARTIDOS POR FOX SPORTS
Mañana sábado, a las 17, Argentina-Paraguay definirán el tercer puesto. A continuación, será el turno de la gran final. Ambos cotejos serán televisados en forma directa, al igual que las semifinales. Sin dudas, la transmisión de la Copa América por la señal deportiva de cable, resultó uno de los más gratos acontecimientos relacionados a dicho torneo sudamericano.