LA «DOBLE VIDA» DE MAURO ANTICO

Era sólo técnico, pero el fin de semana pasado volvió a ponerse los cortos. Previamente al inicio de la segunda rueda, ésto le decía decía a La Voz del Futsal

«Yo dejé de jugar el año pasado, pero del futsal es una pasión», dice Mauro Antico, cuya vida futbolística volvió a posicionarse sobre dos facetas bien diferenciadas. Por un lado, está su habitual labor como DT de Nueva Estrella. Por el otro, desempolvó el rol de jugador, ya que reapareció en la primera de Sportivo Barracas luego de no haber jugado allí desde el año pasado. A pesar de que en octubre cumplirá 38, Antico regresó para enfrentar a El Porvenir, teniendo un aceptable rendimiento, tanto en lo físico como desde lo futbolístico.

«NO HAY QUE BAJAR LOS BRAZOS»
Luego de la ajustada derrota contra el puntero, comentó:
«A pesar de haber perdido jugamos bien. Nos sirvió para agarrar más confianza y ver si podemos estar entre los ocho primeros. En lo personal me sentí cómodo y algo falto de fútbol, pero en la B hay menos intensidad y eso me ayudó. No jugué hasta esta fecha porque los horarios no me lo permitían. Pero con el receso de la A pude volver y reecontrarme con los chicos, con los cuales comparto una gran amistad. Les dije que si no se superponían los partidos con Nueva Estrella, seguiré viniendo porque hay muchos suspendidos y lesionados. Los noté medio bajoneados pero no hay que bajar los brazos. Estamos a unos 15 puntos de los equipos que pelean por entrar al reducido y queda toda la segunda rueda. La idea es jugar cada partido como si fuera una final y tratar de clasificar. ¿Qué dice la familia de mi vuelta al fútbol? Soy casado y tengo tres hijos; mi mujer todavía no sabe que volví a jugar y si no se entera, mejor. Esta semana no voy a llevar la revista a casa y ojalá que internet no funcione por un par de días. Si no, no voy a poder volver a jugar más».

«ME QUEDA MUCHO POR APRENDER»
En cuanto a Nueva Estrella, Antico señaló: «Ahora que empieza la segunda rueda, nuestro objetivo es conseguir una regularidad que nos permita estar un poco más arriba que en el Apertura. En las últimas fechas sufrimos muchas bajas y debimos subir jugadores de tercera, que tienen condiciones pero hay que darles más tiempo. Eso implicó una pequeña transición. Pero para el Clausura arrancamos con todo de vuelta. Tengo todo el plantel a disposición y espero que el arranque sea parecido al de la primera rueda. Yo apunto llegar a una línea de 25 o 30 puntos para estar tranquilos con el promedio».
Con respecto a su experiencia inicial como técnico de un plantel superior, opinó: «Es bastante diferente dirigir que jugar. Uno desde adentro de la cancha no se da cuenta de muchas cosas. Desde afuera la cosa cambia y hay que tomar decisiones. Mi propósito es ir adaptándome y crecer de a poco. En lo táctico, me quedan muchas cosas por aprender pero creo que fui resolviendo más o menos bien. Quizás en el tema del manejo del grupo es donde me faltó algo de experiencia».
Por último, Antico vertió elogios hacia la dirigencia de su club: «No me puedo quejar. Me dieron un apoyo bárbaro. Yo, lo único que tengo que hacer es ir y pensar sólo en trabajar y que el equipo juegue bien».