Luego de su experiencia en Alvear, Alejandro De Nicola no tuvo a su cargo ningún plantel superior de futsal. Sin embargo, no se alejó de la actividad. En esta nota, realizó un balance personal de la temporada que acaba de concluir: "Ha sido un año intenso, con mucho trabajo y estudio, realmente estoy contento de las decisiones que tomé a lo largo del él".
-Contanos tu experiencia en Barracas Central.
-Formé parte de un equipo que tuvo a cargo la coordinación y dirección técnica desde la Tercera hasta la Octava división. Se trabajó a conciencia, con mucha responsabilidad y un esfuerzo enorme que se pudo ver plasmado con una gran mejoría en los jugadores (objetivo principal que nos habíamos planteado), cristalizado con dos subcampeonatos en la segunda mitad del año y con un muy buen posicionamiento en la Tabla General de Inferiores. En el Apertura terminamos en la 15º posición y en el Clausura quintos, casi duplicando la cantidad de puntos del primer torneo. Considero que no es la única variable para determinar si se trabajó correctamente pero es válida para continuar en ese sentido.
-¿Qué te llevó a realizar el curso de especialización de la Escuela de Técnicos con Diego Giustozzi?
-Este tipo de curso es necesario y la idea de la Escuela de implementarlo me pareció excelente. En cuanto al contenido, lo más productivo fue sin dudas los enormes debates que se armaban entre todos con respecto a los temas que planteaba Diego. No conocía a Diego y en el trato semanal me pareció un técnico que cree firmemente en sus ideas y como llevarlas a cabo, con un poder de convencimiento muy alto. Me reencontré con amigos -técnicos que no veía hace mucho y rescato la predisposición que todos tuvimos para compartir experiencias, ideas y hasta materiales propios. Recalco otra vez el tema de los debates entre nosotros porque eran palo y palo, cada uno defendiendo su postura con argumentos y eso fue lo que más hizo que creciéramos todos. En lo personal me sirvió para reafirmar muchas de mis convicciones sobre lo que pienso de este deporte, también para actualizar otras y desechar algunas.
-¿Extrañás dirigir una primera división?
-Un poco extrañé. Pero en el 2015 decidí no dirigir primera, después de hacerlo durante 15 años en forma ininterrumpida. La decisión me sirvió para poder crecer en muchos aspectos pero también me hizo extrañar la competencia con otros técnicos.
-¿Tuviste chances de hacerlo desde que te fuiste de Alvear?
-Sí, a lo largo del 2015 tuve la suerte de que me hayan contactado tres equipos de la "A", pero, primero por respeto al compromiso que tenía con el grupo de trabajo de Barracas Central, a la palabra que le había dado a Jony Sanzi y a que había decidido no dirigir en el 2015 fue que no acepté dichas propuestas.
-¿Qué sensación te provocó el ascenso de Alvear?
-Que los jugadores pudieron saldar una deuda que tenían con la gente y los directivos del club que son personas excepcionales.
-Se fue Valdés de San Lorenzo y Mónaco volvió a Caballito. Vos los conocés bien, ¿tanés alguna opinión sobre el tema?
-Conozco San Lorenzo profundamente, dirigí por más de 6 años ahí y sé perfectamente que tenés que ganar todo lo que juegues. Nico Valdes asumió en una etapa difícil. Encima con su primera experiencia como técnico en un plantel de Primera. Tanto Nico como los jugadores del plantel hicieron el enorme esfuerzo de levantar la disciplina y hoy creo que, gracias a ese esfuerzo, San Lorenzo puede volver a tener objetivos más altos que los tuvo estos años. Nico es fanático de San Lorenzo y si decidió dar un paso al costado habrá tenido sus razones. Hay que respetarlo. En cuanto al Negro Mónaco, me alegró mucho cuando me enteré que volvía a Caballito. Lo pude disfrutar cuando tuve la suerte de dirigirlo. Ojalá le vaya bárbaro.
-¿Cómo ves al futsal en general hoy por hoy?
-Muy competitivo. Muy físico y muy táctico. Eso habla bien del crecimiento de los técnicos, que son los que le dan la impronta a sus equipos. El jugador y el técnico se debieron adaptar a un Futsal que va cambiando continuamente y que cada vez les exige más compromiso en todos los aspectos.Todos los equipos tienen variantes y a la vez soluciones a los diferentes problemas que le pueda plantear el rival. Pero ¿sabes qué? Siempre las soluciones a cualquier problema que te puedan plantear, se resuelve en un 80% con jugadores dotados técnicamente. De ese tipo de jugadores no hay demasiados.
-¿Veremos a De Nicola dirigiendo una primera en 2016?
-La verdad que no lo sé. Mi compromiso hoy es con el grupo de trabajo de Barracas Central. Si recibo alguna propuesta, la voy a evaluar.
-Tu pibe ya está en la tercera de Caballito. ¿Cómo lo ves para el futsal?
-Arrrancó en Promocionales en San Lorenzo y en el 2015, Martín Salerno, Técnico de Primera de Caballito, lo citó entre los 14 jugadores y jugó contra Don Bosco en la Copa Argentina. Una alegría enorme por él. Lo veo mejorar a través de los años. Piensa todo el tiempo en el Futsal, se cuida en las comidas, hace una dieta por su cuenta. Le gusta, lo apasiona. Mejoró en varios aspectos tácticos. Va a depender de él que lo tengan en cuenta, como le pasa a cualquier jugador. Tiene que seguir esforzándose, seguir aprendiendo y tratar de cumplir lo que le pida su Técnico.
FOTOS: De Nicola al recibir el diploma del curso de especialización, junto a Diego Giustozzi y Marcelo Lombardini (arriba). Junto al cuerpo técnico de las inferiores barraqueñas (abajo).
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