agosto 06, 2008

EL ARBITRAJE EN INFERIORES SIGUE PREOCUPANDO

Mediante un extenso mail, la gente de Country nos acercó su malestar por un tema que –como ya hemos tocado en varias oportunidades- nos preocupa a todos. La cuestión es, otra vez, el arbitraje en las inferiores. Los comentarios recibidos al respecto son muy frecuentes. Sin embargo, como en esta ocasión lo sufrido por Country el domingo parece mucho más serio, resolvimos publicar el mensaje. Quien nos lo envió es Emanuel Santoro (foto), si bien resume el pensamiento de toda la entidad banfileña.

Hola, como están? mi nombre es Emanuel Santoro, soy DT de la 4ta y 5ta División del Country de Banfield, ex jugador, ayudante del cuerpo técnico de 1ra, así como también administrador del sitio de la actividad en nuestro club (countryfutsal.blogspot.com), entre otras funciones que en los clubes chicos debemos ocupar un poco entre todos para que las cosas salgan adelante. Realmente no se quien sea la persona que atiende a las consultas por mail, por lo que me voy a dirigir al equipo de La Voz del futsal como una totalidad.
Los molesto por lo siguiente: el pasado día domingo ocurrió un hecho que realmente me superó, tanto a mi como a los chicos que dirijo, al público de nuestro club que viajó hasta Ballester (enfrentamos como visitantes a Las Heras), a los directivos que se encontraban allí y también a la gente del club local. Voy a intentar comentarles como nace la situación y como de desarrolaron los hechos, trataré de no extenderme pero realmente considero grave la situación. Es sabido que los arbitrajes en inferiores no siempre son los mejores, suelen ser estudiantes, tienen muchas chances de equivocarse, y lo entiendo que así sea, como los jugadores también deben tomarlo su estadía en divisiones menores como un escalón más hacia la 1ra división, se que en el día de ayer en la emisión radial de Futsal Planet se tocó el tema de los arbitrajes y se refirieron a lo sucedido con nuestro caso... pero creo que en este caso es algo más profundo que un error involuntario, o un fallo discutido, es una situación que realmente a muchos de los que estuvimos allí nos quitaron las ganas y las fuerzas para seguir adelante.

Puede ser largo, pero les pido 5 minutos para que se informen de lo sucedido:

Hace aprox. 35 días enfrentábamos a este mismo rival, Las Heras en su estadio, (por la anteúltima fecha de la ronda clasificatoria) la jornada había sido normal, con fallos discutidos, pero sin sobresaltos. Llegado el momento de la 4ta división, categoría la nuestra que ya se había consagrado campeon por anticipado semanas atrás, que mantenía puntaje perfecto con igual cantidad de victorias que partidos jugados y un hecho que en nustro club se valora y mucho: ningún explusado. El desarrollo del partido fue algo extraño, al ambiente tomó demasiada temperatura en las tribunas y tras algunas circunstancias que a alguien que no desconfía de la mala fe de ningún árbitro le pueden parecer normal (reitero: todos podemos equivocarnos), el visitante se impuso por 2 a 1, quitándole el invicto y tras el partido hubo algunos reclamos de algunos jugadores visitantes. Uno de nuestros jugadores fue expulsado por último recurso, pero sorpresivamente... a la semana entrante al encontrarnos con el fallo del tribunal encontramos que había recibido 4 fechas, pero no sólo él sino 2 compañeros más que no habían sido expulsados en el trámite del juego sino informados. (sus faltas eran sobresaltos y malos términos, entendible 100% y respetable, hasta diría que estoy de acuerdo). Lo extraño fue que el resto de los jugadores que firmaron la planilla tal día fueron todos informados con una fechas, TODOS. Hasta los que no ingresaron, los que ni siquiera opinaban porque no habían participado, hasta uno de mis jugadores que estaba siendo atendido a un costado de la cancha hacía varios minutos de antes de finalizar el cotejo por el muy gentil médico local. En el fallo del tribunal no se explicaba la causa de aquellas 7 suspenciones. (10 en total, 3 con 4 fechas y 7 con una)
La bronca de los chicos era inexplicable, al enterarse que en la última fecha, jugando como locales, ninguno de ellos podría festejar el título por el que tanto lucharon junto a su gente, sus familiares y amigos. Ese día jugaron chicos de 5ta en 4ta, ellos lo vivieron desde la tribuna, y tras varios intentos de querer presentar cartas pidiendo explicaciones o tratar de rovolver un poco más sobre el tema, se decidió dejar todo ahí, y que aquel confuso episodio de suspención colectiva no pasara a opacar la excelente campaña que habían realizado durante el 1er semestre.

Con tres de los jugadores de la base del equipo titular de 4ta (Piñeiro, Di Nardo y Katlman) suspendidos aún, se inicio la fase de la zona de oro. En la 3ra fecha, casualmente volvíamos a visitar a Las Heras, casi un mes después de aquella fatidica visita. La sorpresa fue que el árbitro era nuevamente aquel con el que nos habíamos llevado semejante disgusto (N. de la R: su nombre es Alexis Polakow). Quienes conocen al Country sabe como trabajamos, que es lo que queremos lograr, Antonio Bucci nuestro delegado es la fiel imagen de lo que es club, que si bien es un club de barrio tiene una metodología de trabajo de integración de los chicos al club más allá de lo futbolístico, y creemos que ese camino nos está dando resultado, no sólo en lo deportivo.
8va y 6ta (dos categorías también campeonas de nuestro club) pasaron sus partidos con victorias, pero con algunas situaciones de parte del juez que llamaban la atención, como el hecho de tomar mate junto al sector local, o de cortar jugadas muy claras sobre el pitido del final del 1er tiempo. TODOS los chicos de nuestro club eran concientes de quien era esta persona, por lo que se los advirtió que al menor comentario, queja, recriminación que le hicieran sus DT los invitarían a sentarse junto a ellos para así evitar todo tipo de conflicto, lo mismo con la gente del público. Parece extraño, pero además de dirigir, hay que advertirle a la gente, a los chicos, que cualquier situación puede ser tomada de la peor manera por el juez. Así fue que la 5ta transcurrió sin graves problemas (quizá el desarrollo del partido hizo que no hubiera emociones). Llegado el momento de la 4ta las cosas cambiaron repentinamente.... el Country llevaba la ventaja de dos goles y comenzaron a sucederse situaciones que cada vez alertaban a los presentes de que algo extraño estaba sucediendo. Sobre el final del 1er tiempo, con más de 4 minutos de adición, el local logra empatar el partido con una 6ta falta, teniendo en cuenta que se habían marcado 6 fouls en los últimos 8 minutos. Es dicutible, cualquier hincha de su equipo diría que los fouls que les cobran no lo son, es comprensible. Nuestro arquero en primera instancia ataja el balón y lo envía por arriba del travesaño, pero el árbitro cancela la acción y reejecuta el lanzamiento por una supuesta invasión. Es discutible, pero nadie le dijo nada, nadie, ni el público, ni los jugadores ni el cuerpo técnico. Así nos fuimos al descanso.
¿Cómo explicarle a un grupo de chicos de 15 y 16 años que quieren jugar a la pelota lo que estaba pasando, que no debían ni moverse porque el mínimo comentario, roce, lo que sea, iba a ser en su contra?
Así fue.... cuando mi cronómetro marcaban 26 minutos (tiempo cumplido y uno de adición), y el Country ganaba 4 a 3, con 3 faltas y sin ningún expulsado, el árbitro señala que iban 22 (extraño) y desde allí en adelante fue realmente bochornoso lo sucedido, desde faltas inexistentes, como "planchas" por cubrir la pelota que eran anotadas como faltas a la culminación de expulsarnos 4 jugadores antes de la finalización del encuentro, que contó con más de 10 minutos de adición. El resultado por 4 a 6 es un ornamento, pero realmente no puedo tolerar ver a mis chicos, que dirijo hace años, llorando dentro de la cancha, mirándome, preguntádome que hacer ante tal abuso, jugadores sentados en el piso sin entender qué estaba sucediendo. Tengo 22 años, y desde los 4 que juego papi fútbol y desde los 10 futsal, y jamás vi algo similar, ni los rivales entendían que pasaba, esta vez confirmo que no se trata de un error conceptual ni involuntario, es algo echo con maldad y realmente estoy muy dolido a tal punto que pensé en dejar de dirigir tras más de 4 años de hacerlo.
En la cancha había silencio, mis jugadores se iban expulsados por "simular" o por "entrar mal en un cambio", cuando yo doy fe ciega de tomar del brazo a cada jugador ingrasante para evitar esa falta. Se puede ganar, se puede perder, se puede empatar, pero siempre con la cabeza en alto, el partido termino y con la ayuda de los jugadores de 4ta que aún se encontraban suspendidos de la vieja suspención y los papás sacamos rápido a los chicos de la cancha y los llevamos al vestuario, para evitar todo tipo de conflicto. No era bronca, no era furia, era sorpresa...
Los entrenadores de Las Heras (Sellanes y su ayudante un muchacho de rastas) se aceraron a mi que estaba de brazos cruzados en el centro de la cancha a segudos de finalizado el partido y me dicen "flaco, disculpame, no se que decirte, se me cae la cara de vergüenza, nunca vi algo así".
Los chicos del Country entrenan varias veces por semana, se toma con total profesionalidad el Futsal en nuestro club más allá de ser totalmente amateur, pero... ¿Cómo explicarles lo que pasó? ¿Cómo decirle que las cosas a veces no dependen del juego sino de un 3ro? ¿Cómo el mismo árbitro que nos informó 10 jugadores, realmente sorprendente, a un mes nos dirije nuevamente y con total mala intención juega con ese sentimiento tan grande en los chicos qu es el fútbol?
Esto no termina aquí, una vez con los jugadores en el vestuario, intentanto consolarlos, porque no era calmarlos, era secarles las lágrimas, era impotencia. No hubo violencia en ningún momento, era un clima extraño. Subo nuevamente a la cancha para pedirle al árbitro las credenciales del CT, a lo que aireadamente me responde "no se si te las voy a dar, hablan mucho uds". Siguiendo con la misma actitud de toda la tarde, de parte de todo el Country, evitando cruzar palabra le manifesté que definiera si iba a entregarlas o no, que realmente nos íbamos y que tenía que saber si me las daba, que como no me había llamado la atención en el juego se las venía a pedir pensando que estaba todo bien.
Su respuesta realmente fue ... no se, no tengo palabras: Juntó las dos credenciales, y entremedio puso la tarjeta roja, extendió la mano y me la dio sonriendo burlonamente. "Que es eso?" fue mi primera reacción. "Tomá, esta llevatela de regalo" fue su respuesta, creo que si faltaba una cereza al postre era esa.
Es martes, son las 7 de la mañana, estoy en la oficina y realmente todavía no entiendo lo que pasó. Se los cuento a uds porque son los medios que cubren al futsal, y como estudiante de periodismo, creo que los medios son la única arma que nos queda a los sin voz, a los de inferiores, a los no afiliados a afa.
¿Cómo va a crecer el futsal en nuestro país de esta manera?
¿Qué hacer? ¿Una carta a AFA? ¿Una protesta? ¿Quien va a escuchar a las inferiores del Country? es más, hasta seguro nos ganamos el rótulo de "quilomberos".
Perdón si los aburrí, ojalá la próxima sea para comunicarles buenas noticias, gracias por la atención.

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