EN LA CALDERA DEL DESCENSO, LAMADRID FUE MÁS QUE HURACÁN

Lamadrid ya le ganó 5 a 2 a Huracán. Los saludos de Viñas, Espigares y Matías Calo. El arquerito del local, con apenas 17 años, fue una de las figuras del partido.

Cumplida la primera fecha de los desquites, tanto el Globo como los Carceleros están en zona de Promoción. Sin embargo, son muy diferentes los estados de ánimo en uno y otro equipo. Los dirigidos por Juan Manuel Meles no logran recuperarse de una prolongada serie negativa, mientras que la gente de Fabio Pérez viene realizando una campaña mucho más aceptable, a lo que hay que añadirle el importante triunfo cosechado esta noche.
A los 6’ el cero fue quebrado por una gran jugada del Bocha Calo. Por ausencia del titular, el Chino Tabares, este arquero con edad de cuarta tuvo la difícil misión de salir de movida. Y la responsabilidad no pareció pesarle en absoluto. Como ejemplo, basta mencionar la apertura del marcador, en la cual salió jugando desde su campo esquivando piernas rivales en una rauda carrera, y cuando llegó al área contraria definió ante Alvarez como si fuera un pivot con mil batallas encima.
Con el 1 a 0, Huracán se apuró un poco más pero, como suele suceder en estos casos, dejó espacios en el fondo, arriesgándose al contragolpe adversario. Por esa vía, Blanco aumentó a los 12’. De inmediato, y acaso en el momento más delicado para la visita, Villordo y Soto hicieron una excelente pared y éste marcó el descuento. El epílogo del primer tiempo fue a pura emoción: a los 17’ Blanco empujó al gol una buena asistencia de Alan Calo y a los 18’, Villordo volvió a descontar: 3-2 y fin de la primera etapa.
Lamadrid madrugó en el segundo tiempo. Sólo iban 10 segundos cuando nuevamente Alan Calo aprovechó una falla de Alvarez (no pudo retener un balón que no llevaba tanta potencia) y estableció el 4-2. Ese tanto inesperado fue un balde de agua fría para la visita, que ya no consiguió recuperarse. Prácticamente todo el segundo tiempo transcurrió con el mismo esquema: el Globo que avanza pero no lastima; el Carcelero que espera y amenaza con liquidarlo de contra. Así, el partido se fue yendo sin novedades en los arcos, hasta que faltando un minuto, el mayor de los hermanos Calo rubricó –mediante el recurso mencionado- una muy buena noche personal con el definitivo 5 a 2.