Jugó tres Mundiales y estuvo más de diez años en Europa. En su regreso a la Argentina, debió retirarse en forma prematura, aquejado por una grave lesión (rotura de ligamentos). Varios años hacía que su nombre no estaba asociado a la actualidad del futsal, hasta que a principio de año, regresó al ruedo, haciendo su debut como técnico, y firmando para 17 de Agosto en dupla con Carlos "Gallego" Sánchez. Este miércoles, su equipo venció a La Ñata, aunque sólo fue el último eslabón de una cadena compuesta por muy buenos resultados en este Apertura para el conjunto de Pueyrredón. Luego del resonante triunfo, Esteban "Yony" González conversó con La Voz del Futsal:
-Es un buen resultado, aunque estos son partidos atípicos: con La Ñata no podés plantear un táctica porque es un equipo que te lleva al desorden. Cuando entramos en ese desorden, es cuando peor jugamos.
-¿A qué te referís concretamente?
-A que lo que buscamos contra La Ñata fue el resultado. No se podía pensar en jugar bien. Había que ganar y punto.
-¿No es siempre así?
-No. Yo no quiero que pensemos en el resultado. Lo que quiero es que los jugadores aprendan lo que es la táctica del futsal.
-¿Es serio no te importa el resultado?
-No me importa ser campeón o descender, sino que el equipo sea competitivo. Obviamente, cuando eso suceda, los resultados llegarán como una consecuencia directa.
-¿Hoy por hoy Agosto es un equipo competitivo o no?
-Por ahora es un muy buen grupo. En lo humano, excelente, y en lo futbolístico, son jugadores de muy buen pie.
-¿Y tácticamente?
-En este par de meses aprendieron bastante y estoy contento por lo que vienen haciendo. Pero todavía falta mucho trabajo. Esto recién empieza.
-¿Pero este gran comienzo no hace que se ilusionen con un campeonato?
-No. Como recién mencioné, el objetivo es que seamos competitivos. Y no creer que por haber ganado algunos partidos ya somos invencibles, como quizás pasó con Estrella de Boedo, que habíamos tenido un par de buenos resultados y ese partido lo perdimos. Ahora tenemos que tratar de no caer en eso de que ya nos las sabemos todas.
-Se te nota muy responsable en esta nueva función. ¿Es algo que cuando eras jugador no sucedía?
-Puede ser. Cuando jugaba yo era medio boludo y no escuchaba al técnico. Cuando estás del otro lado, te das cuenta de eso. Por eso no quiero que los muchachos que uno dirige, comentan los mismos errores que uno cometió.
-¿Con el Gallego Sánchez la responsabilidad es en partes iguales?
-Así es. Somos una dupla. Por ahí en medio del partido él le habla a un jugador y sin haberlo escuchado, yo ya sé lo que le indicó. Y es recíproco. Fuimos compañeros en la Selección y compartimos muchas cosas con el Galle. Nos entendemos bárbaro. Lo mismo que con el Chino Casado, que también integra el cuerpo técnico.
-¿Por qué eligieron 17 de Agosto para arrancar como dupla?
-Bueno, yo en 17 de Agosto terminé mi carrera como jugador y quedó una linda relación con Adrián (Costantino). Una vez él ya me había preguntado si quería dirigir y le contesté que no podía, porque por mi trabajo viajo bastante. Ahora volvió a insistir y lo pensé mejor. Le pedí que vayamos junto con el Galle y el Chino, por la gran confianza que existe entre nosotros. Me gustó el desafío porque es un club que siempre apuesta a estar arriba.
-Pero vos dijiste que eso no te interesa, al menos por ahora.
-Es cierto. Te digo la verdad: es lindo pelear arriba pero yo prefiero salir quinto, sexto, séptimo... Y que mientras tanto el plantel vaya aprendiendo lo que es el futsal tácticamente. Que la estructura se vaya haciendo cada vez más sólida. Lo que no quisiera es salir campeón sin tener una buena base y que después todo se derrumbe como un castillo de cartas.
-¿Cuál sería tu modelo de equipo?
-Kimberley. Porque es un club que comenzó de abajo y de a poquito fue armando la gran estructura que en los últimos tiempos lo llevó a ser siempre protagonista.
-La noche de La Ñata te tocó enfrentar al Turco Sarkis, tu gran amigo.
-Sí. Fue la primera vez que nos enfrentamos. Pero ojo, no hubo cargadas ni nada. Después del partido ni siquiera hablamos, porque él se quedaba a dirigir la tercera, que se jugaba a continuación.
-La última Yony: ¿las lesiones que terminaron con tu carrera ya son sólo un mal recuerdo?
-Sí, aunque un recuerdo no tan lejano. Es más, en estos días me voy a tener que operar de vuelta de la rodilla.
-¿Qué te pasó?
-Me jodí otra vez la rodilla subiendo una escalera mecánica. Meniscos...
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