Anoche, Country-Unión se suspendió cuando faltaban algo más de cuatro minutos. Hoy, Racing-Independiente ni siquiera llegaron a empezar. Los incidentes impidieron que culmine el encuentro de tercera a 50 segundos de la chicharra. Y luego la "ligó" la primera, pues la dupla Viñas -Machado, ajustándose a lo expresado por la Policía, procedió a la suspensión del cotejo principal por falta de garantías.
20.15 hs. La cancha luce semivacía. A esa hora tendría que haber arrancado el clásico. No pudo ser.
El factor desencadenante fue el golpe que recibió Fernando Sotelo (de la tercera roja) por parte de uno de los hinchas locales que saltó a la cancha. La gente del futsal racinguista, desolada, lamentó la lamentable agresión. «Esta no es gente del futsal. La convocatoria para hoy se manejó a nivel filiales y vinieron un montón de personas que no tienen nada que ver con este deporte -señaló Claudio Martino, director técnico y coordinador de la actividad-. Yo estuve trabajando acá en la cancha desde las diez de la mañana, cuidando que todo esté en orden. El esfuerzo que estamos haciendo por el futsal de Racing es enorme. Y de pronto pasa esto, estoy muy triste», completó el Cai.
La puerta del vestuario del árbitro. Adentro, Viñas delibera con la Policía. Los uniformados no dieron garantías.
Por el lado de Independiente, no ocultaban su malestar. Por la agresión sufrida, por el robo de algunas prendas por parte de los energúmenos que invadieron la cancha y hasta por cierto maltrato policial. Sin embargo, no hubo críticas hacia el plantel y el cuerpo técnico rival. Estaba claro que el problema, ocurrió por culpa de esos indeseables personajes ajenos al futsal. Aunque la disciplina, paradójicamente, tendrá que pagar los platos rotos porque éstos se hallaban en el estadio.
Los hinchas visitante reclaman su dinero en las boleterías. Las autoridades de Racing accedieron a la devolución.
Una vez producidos los vergonzosos hechos del preliminar, ya no hubo vuelta atrás. Por más que los ánimos estaban más calmos, en el vestuario de los árbitros se determinó la suspensión. Ahora, habrá que ver el informe. Según los sondeos realizados por La Voz del Futsal, sólo habría sanciones en tercera división. La primera, más allá de no haber podido jugar este domingo, no se vería perjudicada y si el Tribunal lo dispone, podría llegar a reprogramarse pronto. Luego tendría que definirse si se juega con público o a puertas cerradas.
Por último, llegó el momento de la desconcentración, que fue absolutamente pacífica. Primero, se desalojó el sector visitante. Al pasar por las boleterías, los simpatizantes exigieron el reintegro del dinero de la entradas y tras algunos instantes de incertidumbre (y algunas voces subidas de tono), la dirigencia académica procedió a la devolución, gesto que fue valorado por los del Rojo.
Enseguida, salieron los de Racing. Y no pasó más nada. Lástima que ya era demasiado tarde.
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