Se retiró Christians Martínez Cuenca, uno de los árbitros de mayor trayectoria en la actividad. Hace algunas semanas, dirigió su último partido. Luego, dialogó con La Voz del Futsal:
-¿Por qué tomaste esa decisión?
-Existió la propuesta de ser asistente/ juez de línea en cancha de 11. Prioricé el tiempo con mi familia y lo acepté.
-¿Qué sentiste en tu último partido?
-Mucha tristeza, ya que futsal siempre fue muy importante en mi carrera. Era algo que disfrutaba mucho.
¿Te acordás del primero?
Sí, mi primer partido fue en el 2001: dirigí Rosario Central-Deportes Sur con el señor Dardo Viñas, con quien tuve el agrado de compartir muchos otros partidos en todos estos años. El último fue en Kimberly - San Lorenzo (fútbol femenino). Fue muy emotiva mi despedida, el futsal es algo que realmente me apasiona.
-Hablemos de tu balance...
-Es muy positivo, ya que las jornadas trataba de llevarlas de la mejor manera posible, y sobretodo con humor. Era necesario muchas veces para cortar la tensión que generaban los partidos.
-¿Qué te faltó hacer en el futsal?
-Puedo retirarme muy tranquilo, no me faltó hacer nada.
-¿Fuiste un árbitro muy bueno, bueno, regular o malo?
-Considero que soy un arbitro muy bueno.
-¿Tu mejor recuerdo?
-De todos los partidos y lugares me llevo un buen recuerdo.
-¿Y el peor?
-No hubo.
-¿Vas a extrañar?
-Muchísimo.
-¿Cuáles son los mejores amigos que cosechaste?
-El futsal me dio la posibilidad de conocer gente excelente. Por ejemplo el señor Andrés Rovegno. Su partida me causó una gran conmoción; compartí gratos momentos junto a la gente de Las Heras. También tengo que destacar mi gran amistad con el señor Adrian Costantino (17 de Agosto), amistad que traspasó las barreras del fútbol, dado que compartimos cuestiones familiares y personales.
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