"De salud estoy en pleno tratamiento, peleándola días a día... tengo momentos buenos y momentos malos, por la quimioterapia. Pero estoy pasado por una etapa que aunque es muy lenta, es muy buena para mi recuperación".
Marcelo Andrés Díaz recibe a La Voz del Futsal en su domicilio del barrio de Agronomía. Allí, comenta las alternativas de la lucha que está llevando a cabo desde hace algún tiempo. Y, por supuesto, también el futsal estará presente en la charla. "En Lamadrid, con Gabriel Tancredi me bancaron en momentos complicados, pero cuando me fui recuperando, comencé a trabajar porque aparte me hacía muy bien. Estaba limitado en algunas cosas. Pero el trabajo es un cable a tierra. Yo voy a morir en una cancha de futsal".
El Chino integraba el cuerpo técnico de Lamadrid, institución que experimentó, hace un año, la gran alegría de haber subido a Primera B. Sin embargo, a fines de 2018, el descenso lo alcanzó con algunas fechas de anticipación al cierre del torneo: "Pasó lo siguiente -analiza el Chino-. El primer año armamos una pequeña base y nos fue bastante bien. En el segundo año se formó un equipo muy importante para la C, con un sistema de juego de base y la incorporación de un arquero y un jugador como Klotz. Después se fueron los jugadores principales y en el torneo siguiente nos encontramos en la B sin poder traer gente acostumbrada a la categoría. No contábamos con presupuesto como para hacerlo. Por eso nos costó mucho y descendimos. El presupuesto es clave en esto".
Hace algunas semanas, Tancredi se desvinculó de Lamadrid, confirmando su acuerdo con Estrada de Almagro. "Gabriel me dijo: 'Chino, yo voy a este club. Si vos tenés una mejor propuesta, andá'. El se ha portado tan bien que no tengo palabras de agradecimiento. Terminamos en excelentes términos. De hecho me sigue dando una mano a pesar de que ya no trabajamos juntos".
El camino de Díaz a través del futsal, entretanto, quedó asociado a un nuevo destino: "A pesar de lo que me sucedió, gracias a Dios yo siempre tuve trabajo. No puedo quejarme. Arreglé con Don Bosco, voy a dirigir la tercera y a ayudar en la primera. Estoy muy contento, así que estaré por allá aportando mi experiencia. Estamos planificando todo para arrancar a medidados de enero. El año de la B va a ser bastante complicado".
El histórico director técnico, cierra la nota con esta frase: "Estoy con mucha energía para seguir trabajando en el deporte que amo, donde estoy desde 1986 como jugador, y en el cual puse el cogote para un montón de cosas. Verlo brillar me pone muy contento, espero que todo siga así"
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