La campaña fue muy irregular, se alternaron muy buenos resultados con otros que nos complicaron en la tabla y nos relegaron", dice Gabriel Lojk, a propósito de la actuación de Centro Español en el campeonato de la D. "Me desempeñé como delegado general junto a Mauro Bolischki, coordinamos los dos toda la actividad", agrega, en relación a su función en la institución. La primera división nunca tuvo problemas con la desafiliación, aunque tampoco logró llegar al lote de los que peleaban por subir a Primera C.
"Lo que más me gustó del equipo fue la parte ofensiva, al igual que el año pasado fuimos muy efectivos en ese apartado del juego -comenta-. Lo que más nos costó fue la parte defensiva. Eso hizo que en algunos partidos se nos hiciera muy cuesta arriba poder revertir los resultados".
En esta nueva etapa del club en el futsal de AFA, "el objetivo principal en este segundo año y teniendo en cuenta la campaña del 2017 era pelear más arriba pero no se pudo lograr", reconoce. Pero en contraposición a lo ocurrido con el plantel superior, se muestra muy conforme con el desempeño de las divisiones menores. "Esperamos tener un gran 2019 en cuanto a las inferiores, cómo fue éste, con cinco campeonatos. Y fundamentalmente apuntar al objetivo principal de poder pelear por el ascenso".
Las vueltas olímpicas que dio Centro Español son: octava (Apertura y Clausura), sexta (Apertura), cuarta (Clausura) y tercera (Clausura).
La tercera campeona de Centro Español. Arriba, la foto de la octava bicampeona.
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