CABALLITO GANÓ SIN DESPEINARSE

La formación que venció claramente a Viajes Pinamar 9 a 2. Fue casi el mismo resultado con el que ganó Pinocho, pero con la diferencia de que los Verdes nunca sufrieron: primero aseguraron la goleada, después regularon.

Un cómodo triunfo obtuvo el equipo de De Nicola contra Viajes Pinamar, que sufrió su tercera derrota consecutiva y despidió las pocas chances que le quedaban de clasificar para la segunda instancia. Gracias a estos tres puntos, Caballito igualó la línea de Sirio en el primer puesto, y, considerando que los rosarinos poseen un compromiso a priori más difícil, los Verdes adquirieron grandes posibilidades de clasificar primeros en la zona (además, mañana deben enfrentarse entre sí).
Con relación al desarrollo, la superioridad de Caballito fue notable desde el principio hasta el final. Los pinamarenses dieron además la ventaja de jugar sin su arquero (el titular estaba suspendido), por lo que dos jugadores de campo se alternaron en esa posición, sin demasiada suerte. Con lo cual el tanteador rápidamente fue elevándose hasta llegar al inapelable 9-2 del final.
Parejas, Orozco, Bueno, Brundo, Santana (Pinamar), Brundo, Orozco, Serra, Bueno, Aostri e Irala (Pinamar), en ese orden señalaron los goles.

SALDOS Y RETAZOS.
ERA DE FERRO, PERO NO LE IMPORTÓ.
En la foto que ilustra esta nota puede observarse una persona de remera amarilla que se “coló” en la formación. Pero dicha presencia obedece a un motivo concreto, y es que este buen señor es un fanático de Ferro radicado en San Luis, que sabiendo que un conjunto llamado Caballito estaba participando en el Nacional, rápidamente fue a instalarse al Ave Fénix, con camiseta verdolaga y todo (la colgó en la tribuna como una bandera). Los jugadores, sonrientes, agradecieron el gesto, pese a que no se trataba de un simpatizante original.

PELADO SE MUERE POR JUGAR
Fernando Rossi no jugó, y está a la espera del resultado de una ecografía que le realizaron hoy. El dirigente CArlos Cortés informó que mañana se sabrá con exactitud cuàl es la lesión que el goleador de Allende sufrió en la primera fecha. ¡Que no sea nada, Pelado!