Luis Gonzàlez, Pablo Marcone, Martín Amas y Alan Calo, las cuatro incorporaciones de Pinocho para el Nacional.
Antes de comenzar el torneo, los reunimos en una foto junto al técnico Ezequiel Gazzo. Siete días más tarde, volvimos a juntarlos. Esta vez, sus rostros no denotaban seriedad sino una desbordante alegría. Además, del cuello de los cuatro colgaba la medalla que indicaba que Pinocho era el campeón del Nacional.
LUIS GONZÁLEZ: “OJALÁ PUEDA QUEDARME”
“En esta final demostramos todo lo que es capaz de dar este equipo”, señaló Luis González. El jugador de Argentinos, luego de un comienzo errático del torneo, se fue soltando y, sobre todo en los últimos dos partidos, se aproximó al gran nivel que tuvo en La Paternal el año pasado. “Me fui sintiendo cada vez màs cómodo con el correr de los partidos. Al principio todavía no estaba bien acoplado al sistema de juego, pero gracias a mis compañeros, que me tuvieron mucha paciencia, pude terminar actuando en un buen nivel”.
González protagonizó en el primer tiempo una jugada que despertó la admiración de todo el estadio: Alan Calo trepó por izquierda y ¡de rabona! mandò un centro rasante. Luisito le dio como venìa y el balòn pegó en ambos postes antes de salir. “Me quería morir cuando vi que no entró esa, pero por suerte en el segundo tiempo me tomé revancha”, dijo Lucho, que en el complemento marcó dos goles consecutivos, en el minuto 7.
“Esta es mi máxima alegría en el futsal. Por ahí algún triunfo importante con Argentinos lo celebré mucho en su momento, pero nada se puede comparar con esto”. A propósito de su club de origen Gonzàlez manifestó que su ciclo està cumplido allí: “Ya está hablado que no seguiré. Ojalá pueda quedarme en Pinocho porque el trato de esta gente es muy bueno. Pero si sale alguna otra propuesta de todas formas no dejaría de analizarla. ¿17 de Agosto? Sé que están interesados pero todavía no hablé con nadie. Veremos en Buenos Aires…”
Pablo Marcone: “Al lado de estos monstruos juega cualquiera”
En silencio, Pablo MArcone fue ganándose un merecido lugar en el plantel pinochista. En los primeros partidos ni siquiera estuvo entre los doce que salían a la cancha, pero de a poco jugò màs y más minutos, hasta que inclusive en la final en el tiempo que estuvo en cancha fue importante en el andamiaje del elenco campeón. “Me integré muy bien, aunque la verdad que al lado de estos monstruos juega cualquiera. En las primeras fechas no se encontró el nivel de juego, pero después está claro que levantamos muchísimo”, afirmó el ex jugador de Amèrica, quien se reintegró a Pinocho, equipo que lo había cedido a préstamo durante la temporada que acaba de terminar. “Tengo que estarle demasiado agradecido a la gente de América, que me abrió las puertas de par en par. Mariano (Gómez), Farid (Prieto) y Totó (Squillace) se portaron bárbaro conmigo y ni hablar de mis compañeros. De todos ellos guardo un recuerdo espectacular”.
MArcone se refirió al aspecto futbolístico: “En la parte personal, diferencias en el juego prácticamente no hubo. Mi función acá es muy similar a la que hacía en América. Los dos cuerpos técnicos me pedían que hiciera hincapié en la marca, que es mi fuerte”.
Con 22 años, esta fue la primera temporada de Marcone en la actividad. “Yo vengo de cancha de once en Platense y me encontré con un deporte totalmente distinto. Se me complicó bastante al principio, pero gracias a lo que aprendí en América, pude salir adelante”.
El defensor no quiso olvidarse de Facundo Ruscica, quien lo “descubrió” y lo fichó para Pinocho hace menos de un año: “Como dije, aprendí mucho en América, aunque él fue el que me vio condiciones para esto”.
Alan Calo: “Siempre te la devuelven redonda”.
“Estoy muy contento por haber jugado con esta banda de monstruos, porque eso es lo que son”, manifestó Calo, visiblemente emocionado después de la final. “Salir campeón es hermoso, pero jugar con estos pibes es un orgullo increíble”, agregó quien aún sigue siendo jugador de Lamadrid. “¿Cómo no me voy a acoplar bien al equipo si cuando vos tocàs te la devuelven redonda y te entienden siempre”, respondió, al hablar de su rápida adaptación.
“En lo personal fue un campeonato bastante parejo, y en lo colectivo en los dos partidos decisivos demostramos lo que realmente puede llegar a rendir este equipo”, puntualizó Calo, quien hizo varios goles durante el certamen: “Me causó una emoción cada uno que me tocó gritar, pero obviamente me quedó con el que hice en la final, por el significado que tuvo”.
Al igual que MArcone, Calo no quiso dejar de hacer alusión al club para el que actuó durante toda su carrera: “Si no fuera por Lamadrid yo no estaría acá, así que sólo tengo palabras de agradecimiento. Antes que nada, quiero darle un gran saludo a Fabio (Pérez) a Mauri (Ferraris) y a todos mis amigos del club”.
El futuro del desequilibrante goleador es todavía un gran interrogante, si bien Pinocho tratará de retenerlo en sus filas: “No tengo idea qué es lo que va a pasar. Vamos a ver que pasa en Buenos Aires”.
Martín Amas: “Somos los mejores de Argentina”
El Zurdo Amas también empezó la semana con algunas dudas, pero en los partidos definitorios elevó su nivel hasta llegar al punto de desempeñar un brillante papel en la final: “Tengo una felicidad enorme por haber vuelto a Pinocho y a festejar un nuevo campeonato. Veníamos hablando que estábamos jugando mal, que había que ponerse las pilas y el sábado y el domingo demostramos que somos los mejores de la Argentina”.
Amas tocó un tema puntual: el de las declaraciones que hizo el plantel de River, asegurando una superioridad que jamás existió: “Nos pegábamos los reportajes que daban ellos en la pared y creo que eso nos dio un poco más de energía para salir con todo a ganarles. Salìamos cada vez màs enojados y estábamos esperando este día para enfrentarlos. No habíamos jugado antes en torneos oficiales y por eso algunos todavía tenían dudas. Pero ahora con esto, ya está, no queda nada más que decir”.
Con respecto a lo personal, Amas expresó: “Me sentí muy bien a pesar de aquella vieja lesión. Pero Mariano (Dellamas) y Aldo (LLermanos) me recuperaron bárbaro. Anduve en un ochenta por ciento de mis posibilidades”, dijo quien para muchos, fue el autor del gol más lindo de la semana: el 2-0 en la final contra River: “Me había errado cinco sextas faltas en nuestro enfrentamiento anterior. Por eso estaba recaliente y no podía dormir pensando en la revancha. ‘Cuando tenga un mano a mano se la voy a picar seguro’, me imaginaba. Y por suerte se dio”.
Amas confirmó que se quedará en la entidad de Villa Urquiza: “El pase a Italia se complicó así que ya es seguro lo de Pinocho. Ya hablé con los dirigentes de Ferro y me dijeron que no habrá ningún problema”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario